Algo para recordar y “cargar las tintas contra nosotros”, como dirían
los jujeños. La primera división de Cámara
del Tabaco equipada y lista para
jugar, se quedó “afeitado y sin visita”. Había preparado más de 200 sándwiches
de milanesa y gran cantidad de gaseosa para el “tercer tiempo”. Esperó
vanamente la llegada de un equipo de Jujuy,
que jamás apareció. Comentaron después que el Luis “Cazuela” Otero y su plana mayor, “pasó dos meses con el mismo
menú”. Alguien con experiencia le había anticipado sobre la impuntualidad de
los jujeños, diciéndole “mirá que llevan
en los genes dos éxodos; son hijitos para hacerse humo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario